La remodelación de un baño cuadrado, ya sea pequeño o grande, presenta ciertos límites formales que pueden convertirse en puntos fuertes mediante un diseño personalizado y específico para este tipo de distribución.
Amueblar y diseñar los elementos de un baño cuadrado con ducha puede incluso convertirse en una oportunidad para crear un auténtico oasis de bienestar, donde cada área esté bien definida para maximizar la funcionalidad y la comodidad.
No olvidemos que las normativas municipales requieren una serie de requisitos en cuanto a las dimensiones mínimas del baño, y en el caso de una distribución cuadrada, esto se traduce en ciertos ajustes a tener en cuenta en la elección del mobiliario y en relación a su ocupación.
Al mismo tiempo, al tratarse de una planta de forma regular, la disposición del mobiliario será simétrica y ordenada, lo que confiere al ambiente un aspecto limpio y riguroso muy apreciable.
Optimizar la Distribución de un Baño Pequeño Cuadrado
Una planta cuadrada tiene cuatro lados iguales o casi iguales, y en estas cuatro paredes hay que ubicar no solo los muebles sino también la puerta y, posiblemente, un toallero calefactor.
Tener en cuenta cuántos y qué muebles incorporar es el primer paso en un diseño eficaz, partiendo de una composición estándar que incluya lavabo, inodoro y bidé, ducha o bañera. En caso de espacio muy reducido, se puede optar por una ducha de suelo y sustituir el bidé por un rociador de pared junto al inodoro.
Estas son las configuraciones básicas que pueden ampliarse en caso de disponer de más espacio y el deseo de tener un baño cuadrado más completo y confortable.
El confort y la funcionalidad son siempre las prioridades del diseño, y optimizar la planta significa incorporar todos los elementos necesarios de manera que sean fácilmente utilizables, facilitando también las tareas de limpieza del baño en sí.
La Distribución del Mobiliario en un Baño Cuadrado
Incluso en un baño de planta cuadrada, la disposición clásica y funcional implica que el inodoro y el bidé estén uno al lado del otro, instalados en la misma pared. Este vínculo organizativo también es un punto de partida útil para entender cómo gestionar las paredes disponibles.
En el lado opuesto a los sanitarios, se puede colocar la ducha en esquina, lo que permite optimizar el espacio, y al lado de esta, el lavabo.
Para este último, un mueble con cajones puede ser muy útil para guardar secadores, cepillos y otros productos y accesorios para el cuidado personal. En una tercera pared, adyacente a la de la ducha, se puede instalar el toallero calefactor, donde en invierno se puede calentar la bata de baño para la ducha.
La tercera pared servirá para la puerta, cuya apertura, si es posible, debería ser corredera o hacia fuera del baño para no obstaculizar el espacio interior.
Baño Cuadrado con Ducha o Bañera
La elección entre ducha o bañera, en el caso de un baño cuadrado, está relacionada con dos factores fundamentales. El primero es el espacio disponible: las dimensiones mínimas de una ducha funcional son inferiores a las de una bañera.
Esto significa que si no hay suficiente espacio para una bañera, se está obligado a optar por la ducha. Si, por otro lado, hay suficiente espacio para una bañera, la elección se convierte en una cuestión principalmente relacionada con los hábitos y deseos personales.
Por ejemplo, si no se tiene la costumbre de bañarse, se podría optar por una gran ducha agradable de ver y agradable de usar, donde se puedan instalar cromoterapia, música, vapor o incluso un asiento para crear un pequeño spa privado.
Si se prefiere la bañera, y es el único baño de la casa, una pared de vidrio la hará multifuncional y utilizable tanto para bañarse como para ducharse.
En un baño cuadrado muy amplio, es posible instalar tanto la ducha como la bañera, y crear una auténtica zona de bienestar. Entre las soluciones de diseño recurrentes hoy en día, es interesante ubicar la bañera o la ducha en la pared con ventana, una elección que permite optimizar el espacio y aprovechar al máximo la presencia de luz natural.
¿Qué Sanitarios Elegir para un Baño Cuadrado?
En cuanto a los sanitarios, hoy en día las empresas ofrecen soluciones formales innovadoras que combinan estilo y funcionalidad. La primera diferencia a considerar es entre sanitarios de apoyo y suspendidos: estos últimos transmiten una mayor amplitud y ligereza visual, y pueden ser útiles para mejorar la percepción del espacio en un baño cuadrado pequeño.
Los sanitarios de apoyo son visualmente más ordenados y, en algunos casos, se prefieren para las tareas de limpieza del suelo. La forma de los sanitarios puede ser ovalada, redondeada o cuadrada: la primera es una elección clásica, la segunda puede suavizar la geometría de la planta cuadrada mientras que la tercera puede acentuarla.
En cualquier caso, es importante elegir teniendo siempre en cuenta las características y el estilo de los otros elementos de mobiliario, especialmente del lavabo y de la ducha o bañera. Incluso en el baño cuadrado, de hecho, la elección del mobiliario debe perseguir la armonía y la coherencia estilística para optimizar no solo la funcionalidad sino también la estética y el confort visual de quienes lo utilicen. Leer más sobre cocinas coloridas
